Análisis: Like a Dragon Infinite Wealth PS5

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El lanzamiento de Yakuza: Like a Dragon fue un movimiento arriesgado. A finales de 2020 vimos una aventura que lo apostaba todo por Ichiban, un nuevo personaje y un sistema de combate por turnos que rompía con todo lo que habíamos visto en la franquicia. El resultado fue uno de los mejores juegos de ese año. Tenía una personalidad increíble y un sentido del humor con bromas que todavía recordamos a día de hoy. Si os apetece podéis volver a leer el análisis que le dedicamos entrando en el siguiente enlace.

El juego empieza justo después de Like a Dragon. En esta ocasión ya no empezamos desde lo más bajo. Ya formamos parte de la sociedad y se nos trata como el Héroe que siempre habíamos querido ser gracias a los JRPG a los que habíamos jugado de pequeños. Como siempre pasa, cuando empiezan a ir bien las cosas nos enteramos que nuestra madre está viva y viviendo la buena vida en Honolulu. Recogemos nuestros bártulos y nos vamos a buscarla como si no hubiera un mañana. El cambio de escenario implica nuevas mafias, nuevos personajes y nuevas maneras de montar pollos mayúsculos por donde pasamos. Pero no sabes lo mejor: el bueno de Kyriu también está en Hawai buscando a nuestra madre. Y no tiene buenas intenciones. Tranquilo, no haré spoilers pero era necesario mencionarlo.

Puedes jugar al juego si no has jugado a los anteriores pero te perderás los infinitos guiños que hay. Si no tienes tiempo ni dinero lo más recomendable es ver algún resumen por YouTube o leer alguna Wiki pero creeme que merece la pena porque hay situaciones que ponen los pelos de punta.

El sistema de combate mantiene los turnos del anterior juego pero añade nuevas variantes. Ahora tenemos la opción de mover a los personajes durante nuestro turno. Eso le añade un componente estrategico de colocación de personajes para hacer golpes únicos y combos devastadores. También aparece la una Guardia Perfecta, los Ataques que rompen la guardia por la espalda y el medidor de frenesí que nos permite combatir como los Yakuza de toda la vida durante unos segundos. En cuanto a las clases te partes de risa porque comprenden jobs como taxista, electricista o surfero.

En el anterior juego tenías que ir con cuidado porque llegados a cierto punto de la trama cualquier enemigo podía hacerte ver la pantalla de game over. Ahora gracias a un sistema de colores podemos saber el nivel de nuestros enemigos.

Como siempre hay un montón de cosas que hacer en Infinite Wealth. La misión principal siempre estará ahi pero podemos perdernos en el mundo de las secundarias, ganar dinero para comprar mejor equipo o conseguir invocaciones. Las actividades incluyen el mítico Karaoke, los arcade, los locales de compañía y un montón de situaciones random. Por si fuera poco también está el juego de Pokémon encubierto que nos presenta el gran Profesor Sujimon. Por último también está la Isla Donko en la que podemos montarnos nuestro remanso de paz y diseñar un resort. Tiene un montón de Animal Crossing vibes y eso siempre se agradece.

El juego nos llega con textos en castellano con voces en japonés o en inglés. La historia principal de Like a Dragon: Infinite Wealth puede rondar fácilmente las 40-50 horas si os centráis exclusivamente en ella y no hacéis ninguna otra actividad secundaria.

El otro día se anunció que este Like a Dragon Infinite Wealth tenía unos de los mejores recibimientos de la franquicia en cuanto a ventas y nos alegramos un montón.La fórmula se ha mejorado en todos los aspectos y nos encontramos ante un título más redondo, divertido y completo. Si quieres conseguirlo todo desbloquearlo todo te esperan más de 100 horas de pura diversión. Nosotros nos lo hemos pasado genial con Ichiban, tanto es así que es uno de nuestros personajes favoritos del mundo de los videojuegos. Si queréis saber por qué se ha ganado ese sitio de honor solo os queda jugarlo. Hacedme caso: juegazo.

Nota: 8.7

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