Opinión de usuario: De educación y videojuegos

Hace un tiempo, en el portal de 3DJuegos se publicó una noticia un tanto curiosa,en la que la redactora informaba sobre algunos profesores de universidad en Canadá que utilizaban el título Xenoblade Chronicles 2 en sus clases. Algo que habría quedado en una anécdota curiosa y ya, pero personalmente me dejó un buen regusto ver cómo el medio se utiliza de maneras bastante más diferentes a lo esperado, dejándose ver en lugares tan insólitos como pueden ser clases de universidad. Esta situación, el uso de videojuegos para la explicación de conceptos en ámbitos tan dispares como estadística o antropología está unido a la ludificación o gamificación, enfoque que busca dar una vuelta a la educación mediante herramientas como pueden ser los videojuegos.

Ludificación es el término castellano para la aplicación de juegos o las mecánicas de estos en otros ámbitos o situaciones fuera de los mismos, y fue acuñado por Nick Pelling a inicios del milenio, ganando progresivamente fuerza y tracción en el mundo empresarial e incentivando la fidelización a un producto o servicio. Esto se intenta trasladar a la educación debido a algunas cualidades propias de los videojuegos, como pueden ser el aumentar la motivación de los alumnos a volverlo mas atractivo, una actitud mas activa por parte de los chavales al tiempo que los vuelve más autónomos o que perciban los fallos y errores que cometen al recibir una retroalimentación instantánea o a corto plazo. Este concepto recibió ocho principios al establecer Yu Kai-Chou el sistema octalysis,el cual exploraba los diferentes aspectos de los videojuegos como pueden ser la progresión y el logro, la personalización de un avatar o el trabajar para evitar perder lo obtenido hasta el momento, y las reacciones que esto tenía en los jugadores al igual que las medidas que tomaban en consecuencia de lo ocurrido.

¿Ya donde va esto? Pues a que, como indicaba antes, me alegra ver que algo como un JRPG pueda utilizarse de maneras para las que no había sido concebido.Recientemente he finalizado mis estudios en el máster de profesorado, y el trabajo final resulto ser de la ludificación, sus pros y contras además de sus aplicaciones. Lejos de la antropología o la estadística, mi especialidad es Historia, y aproveché títulos como pueden ser World in Conflict, Twilight Struggle o la franquicia Call of Duty para la enseñanza de la guerra fría, mostrando la información teórica enseñada por partes como puede ser lo social, lo económico o lo político al mismo tiempo y en movimiento,respondiendo al jugador. O aprovechando los recursos que ofrecen para trabajarla propaganda y la distorsión de los hechos. Esto podría extenderse a toda la programación haciendo uso de títulos como pueden ser Valiant Hearts para la primera guerra mundial, Victoria II para los imperios coloniales y el siglo XIX o Assasin’s Creed Origins y Odyssey para la historia antigua. Y estos son ejemplos que se me han ocurrido en escasos segundos.

En el trabajo indicaba que, pese a su enorme alcance y audiencia, los videojuegos apenas tienen cobertura legal, a pesar de las posibilidades que ofrecen de aplicarse correctamente en ámbitos como puede ser la educación. Ya se realiza con el cine, visualizando películas en algunos temas conforme se avanza a través de la programación, pueden utilizarse los videojuegos de una manera similar, trabajando así el temario con herramientas mucho mas familiares y atractivas para el alumnado y logrando así captar su atención e interés, siempre teniendo en mente la mejoría de la educación. No voy a alargarme mucho más,pero si visualizar una sección de un juego, utilizarlo como ejemplo de ejercicios o jugar parte de él (fuera del aula) facilita la comprensión y relación de la información que se va a explicar, es un frente que, de explorarse, podría dar de qué hablar. Se trata de un tema y un enfoque que muestra que los videojuegos hace mucho que dejaron de ser un simple mata-marcianos, y si se puede utilizar Xenoblade para estadística o antropología,no veo por qué no podrían utilizarse otros títulos en materias que no estén relacionadas o, por el contrario, aborden lo que se va a cubrir de manera directa. NieR: Automata no estaría fuera de lugar en una clase de filosofía, creo yo.

Muchísimas gracias por leer.