Análisis Final Fantasy VII Rebirth PS5

Final Fantasy VII siempre será la entrega más especial para varias generaciones de jugadores. Para muchos supuso la puerta de entrada al género en la época de la primera Playstation. Encima de sus hombres recae la responsabilidad de cumplir las expectativas de todos nosotros. La primera entrega del remake cumplia con los esperado y sorprendía a todos con un final que nos dejó con la boca abierta. Ahora Rebirth llega con la ambición de tener un mundo abierto de un tamaño descomunal en el que hay un montón de cosas que hacer. ¿Qué pasará con la trama? ¿Y con la famosa escena de Sephiroth? Después de terminar el juego ya puedo hablar con propiedad y contar lo que me ha parecido. Allé voy.

El primer juego terminaba con nuestros héroes abandonando Midgar. Ahora tenemos un mundo abierto repleto de ciudades icónicos. Los que jugaron al juego original llorarán de la emoción con algunos escenarios y sobre todo con las nuevas versiones de la banda sonora. Pero tranquilo porque te esperan sorpresas y de las buenas. El guión está escrito de forma sobresaliente y podemos decir que se han mejorado todas las decisiones del juego de la primera Playstation. El tono general del juego es de una aventura épica en la que hay lugar para la acción, la epicidad pero también para el humor más absurdo y la diversión más directa. Además se ha aprovechado para ampliar el lore de personajes que necesitaban más protagonismo como el comer gracias a su inmenso carismo. Por supuesto estoy hablando de Vincent.

El Mundo Abierto de Final Fantasy VII Rebirth es difícilmente mejorable. Tenemos ciudades, mazmorras, activades como la caza, las fotos, las partidas de cartas, las torres... Créeme que hay un montón de cosas por hacer, tantas que es normal abrumarse en las primeras horas de juego. Por suerte pronto nos dan la posiblidad de utilizar el Chocobo para cubrir distancias y usar el viaje rápido. Por supuesto puedes ir a por la trama principal y pasar de todas las secundarias pero es que en este caso están muy curradas y se ha pensado en la coherencia de todas ellas. Además visitamos un montón de zonas distintas entre sí con un montón de verticalidad y cofres escondidos, por lo que no se hace nada pesado explorar el mapa.

Es hora de hablar del sistema de combate. Durante la última década Square Enix ha ido perfeccionando en sus juegos su sistema de combate. En el caso de Final Fantasy se ha encontrado el equilibrio perfecto entre el combate por turnos y el el Action RPG. En Final Fantasy VII Remake funcionaba pero en Rebirth la fórmula se ha mejorado hasta la perfección. Nos podemos mover libremente mientras atacamos y rellenamos nuestra barra BTC. Es entonces cuando podemos parar el tiempo para elegir nuestra acción o acceder a atajos en el mando para lanzar nuestros ataques sin que se detenga la acción. No falta absolutamente nada de nada. Parrys, combos aéreos, invocaciones, límites, acciones combinadas. Luchar es tremendamente divertido y cualquier batallita se convierte en algo totalmente épico.

Otro de los grandes aciertos es que los personajes son muy distintos los unos de los otros y se compenetran de maravilla con los personajes de la primera parte. Lo ideal sigue siendo ir cambiando entre los personajes según nuestro estilo de combate y elegir los combos más efectivos manualmente. Quiero hacer una mención especial a los jefes finales.Son combates tremendamente exigentes, con varias fases y llenos de escenas que nos pondrán los pelos de punta y añaden poco a poco nuevas mecánicas.

Uno de los mayores aciertos de Final Fantasy VII Rebirth es que ha respetado el espíritu desenfadado del juego y se han mantenido los momentos graciosos y los minijuegos propios de la época. Tenemos un montón de cosas que hacer. Tanto es así que a veces nos ha dado la impresión de estar en uno de los juegos de Yakuza. Entre todos ellos destaca el minijuego del piano y el viciante Sangre de la Reina, un juego de cartas al que no puedo dejar de jugar.

Si vamos directos al lío el juego tiene una duración de unas 50 horas. Si queremos hacer todas las misiones secundarias y conseguir el 100% el contador se nos irá hasta las 150 horas. Hay que tener en cuenta que para conseguir el Platino será necesaria una segunda vuelta porque nos tendremos que pasar el juego en difícil.

En cuanto a los gráficos todos los personajes principales están modelados de forma espectacular. El juego visualmente es una pasada y es una locura todo lo que han tenido que hacer respecto a la primera entrega para adaptarlo al concepto de un mundo abierto. Es entendible que se hayan tenido que tomar algunas concesiones como texturas de baja calidad. En el momento de escribir esta review puedo decir que lo más recomendable es jugar en Modo Gráficos a 30fps. Casi siempre soy un gran defensor del modo Rendimiento a 60fps pero en esta ocasión cuando lo activamos la imagen se emborrona demasiado y la verdad es que es una pena jugarlo así. Square Enix anunció que queda muy poquito para que el juego reciba un parche de lanzamiento que mejore la resolución.

La banda sonora es tan espectacular que podría fácilmente ser considerada como una de las mejores de la historia de los videojuegos. Las nuevas versiones son simplemente perfectas. El solo hecho de pasear por el mundo y escuchar la banda sonora lo convierte en una experiencia la mar de divertida. El juego nos llega con textos en castellano y voces en Inglés o Japonés.

Conclusiones:

Final Fantasy VII Rebirth es sin duda un serio candidato a mejor juego del año. Para los fans del juego original es un sueño hecho realidad. Si nos hubieran dicho hace años que podríamos jugar a algo de esta calidad habría sido difícil de creer. Nos encontramos ante un juego tan bestia que nos tendrá durante semanas y meses disfrutando con cada detalle. A nivel emocional se nos han puesto la piel de gallina en un montón de ocasiones. Se que estás deseando saber qué pasa con determinado personaje pero créeme que merece la pena llegar a ese momento sin saber nada de nada. No era nada fácil porque en estos casos lo más fácil es lo que fans se enfaden pero en esta ocasión han creado una obra maestra a partir de uno de los mejores juegos de todos los tiempos.