Nintendo y Phillips llegan a un acuerdo y terminan la guerra de las patentes

Hay que remontarse al año 2011 para conocer los inicios de esta historia. La conocida marca Philips avisó a Nintendo que estaba infringiendo dos de sus patentes con los sistemas de control utilizados en los periféricos de Wii. Después de varios años de amenazas, en 2014 dieron presentar una denuncia en la que pedían una compensación de hasta tres veces los daños causados por las faltas y una orden judicial para suspender preventivamente las ventas de los productos infractores. Concretamente Philips se declaraba poseedora de la patente de un dispositivo de control corporal virtual con el que el usuario navegaba por una interfaz usando movimientos intuitivos.

Philips realizó la demanda en Alemania, Francia, Reino Unido y Estados Unidos. En el pasado mes de junio, Philips obtuvo una primera victoria. Si Nintendo no tenía cuidado, las ventas de Wii, Wii Remote, WiiU, WiiU Gamepad y Wii Mini podrían verse bloqueadas. Finalmente las compañías han llegado a un acuerdo gracias al cual cada una podrá usar las patentes de la otra y Philips dejará de solicitar la retirada de estos productos. No se han conocido los términos financieros del acuerdo. La directora legal de Nintendo Europa ha afirmado:

"Estamos muy contentos de haber llegado a un acuerdo con Philips, ya que esto demuestra que ambas empresas reconocen la importancia de lo derechos de la propiedad intelectual. Nintendo tiene una importante cartera de IP y una larga historia de desarrollo de productos innovadores a la vez que ha respetado siempre los derechos de propiedad intelectual de los demás."