Se termina Animal Crossing sin gastarse ninguna baya WiiU 3DS

Así es, una persona ha hecho un reto muy extraño: Acabarse el juego Animal Crossing New Leaf sin gastarse ninguna baya. Esto es igual de impactante que la persona que se acabó Habbo sin gastarse ningún credito.

La persona que ha conseguido este record ha sido Josín Cluni, un chico de un pueblo desconocido para todos y que no nos ha querido decir el nombre. Al parecer le regalaron el juego hace un año y cuando vio esto dijo "Esto no son euros, son frutas, así que para que las necesito" y así fue como las empezó a ahorrar y no a gastar hasta que se dio cuenta de su error, pero siguió.

Cuando entramos en la ciudad de Josín, vemos todo lleno de hierbajos, según él eso le da a la ciudad un toque "pueblerino", cuando vemos su casa nos asombramos. Lo normal de este juego es tener una mansión de oro con television de 45 mil pulgadas y un giroide con forma de nevera, pero Josín tenia la tienda de campaña que te hacen la principio del juego, entramos en ella y hay un farol a la esquina que es el que te da Canela al principio, pero el resto son cosas sin sentido: Una cama rococó, una mesa rústica, un karaoke junto a algunas cajas de cartón y objetos del mar. Según Josín todo lo ha conseguido mediante regalos de los árboles y de los vecinos.

"Me encontré la cama un dia que estaba moviendo los árboles, tras dos picaduras de avispas, una hoja cayó de una de ella y ví que era una cama, sigo sin entender que hacia una cama en un arbol pero ´´a cama regalada no le mires la sabana´´, el resto fue de hablar durante tres horas con los vecinos y dos intervalos con los puntos suspensivos"

Despues nos enseña lo que tiene en las taquillas de la estación: Fósiles sin entregar al museo, dos tiburones, un celacanto que él lo llamaba "Dálmata al reves" y muchos bichos y conchas.

"La mayoria de las camisetas que he encontrado son de la zona de comisaria, por ejemplo, el paraguas roto me lo encontré asi, junto a muchas trampas y un detenido."

Después de eso nos fuimos en el tren hacia redacción no sin antes presenciar un ritual a los invitados de una vecina bajo la lluvia que nos daba la buena suerte y que nos caigan desde los cielos latas de lasaña.