Durante este último mes, me he dedicado a hablar de varias de mis sagas favoritas, ha sido una experiencia estresante y que ha requerido mucho trabajo, pero al final, resulta gratificante ver el fruto de todo este trabajo… Pero, hay una gran diferencia entre hablar de varias sagas que te encantan y que pueden tener varios juegos entre sus favoritos…. Y hablar de, no sólo tu saga favorita de la historia, sino de ese gran juego que tenemos todos nosotros en nuestro corazón, un juego que te ha hecho vivir tantas experiencias épicas, un juego con momentos divertidos que te sacan sonrisas, un juego con momentos bellos en el silencio, un juego… inolvidable… Damas y caballeros, os presento el final del Nintendiciembre, hoy hablaremos de The Legend of Zelda.
Link es un personaje avatar, pero no es un simple avatar, es el avatar por antonomasia, el primero, el original. Este pequeño guerrero verde es el primer intento en la industria del videojuego de crear una forma en la que el jugador se sintiera conectado con el protagonista del juego, por eso es por lo que se llama Link… Y bueno, que puedo decir de este tío. Cada vez que juego en un juego de Zelda, me siento en su piel, siento que yo soy el personaje, sus acciones son las que yo haría… Y es que hay una versión, una interpretación del personaje que simplemente me parece perfecta, es alguien valiente pero que al principio no pretendía salvar el mundo sólo quería rescatar a su hermanita, pero en su viaje descubre que es el elegido, el que tiene que librar al mundo del mal… Y acepta su rol dentro de este gran plan creado por los dioses… Es el temple, el coraje, la pureza de este personaje lo que más me motiva a seguir. Normalmente, odio los personajes completamente buenos, porque suelen ser planos pero Miyamoto lo consiguió, consiguió crear un ejemplo, un modelo tan bueno, tan impío… que cuesta no admirarle…
Y los personajes secundarios… Tenemos una gran cantidad de personas peculiares, personas increíbles propias de un cuento de hadas, criaturas místicas, agradables, con su estilo de vida propio, hay personajes raros como Tingle, personajes amables como Malon, personajes serenos y nobles como el Rey de Hyrule… La princesa Zelda, una monarca que tiene que cuidar de su pueblo, escrita de muchas formas, pero casi siempre describiéndola como una reina que se preocupa por sus súbditos y que busca la paz en su reino… Mi encarnación favorita siendo la que en vez de ser la gobernante de todo un pueblo, es una simple chica enamorada de nuestro héroe que cuando descubre su destino, lo acepta…Finalmente, los villanos, tenemos a Zant, un usurpador que sólo busca el poder que enloquece en sus últimas horas de vida, Ghirahim, un demonio loco siervo del rey de la oscuridad, el Heraldo de la Muerte, el mayor enemigo con el que se ha enfrentado Link y finalmente, Ganondorf, un rey de un pueblo azotado por la desgracia que sucumbe a la oscuridad e intenta conseguir el poder de la trifuerza… Mi encarnación favorita es la que aparece en el mismo juego que mi versión favorita del héroe de Hyrule.
Supongo que a partir de las descripciones habréis adivinado cuál es mi juego favorito de toda la historia… The Legend of Zelda: The Wind Waker.
Este juego es simplemente… una obra maestra. Mientras escribo estas líneas se me hace un nudo en la garganta debido a que este juego es simplemente increíble para mí. Todos tenemos ese juego del que guardamos tantos recuerdos y que simplemente nos emociona, para algunos ese juego es Final Fantasy VII con la muerte de Aerith, otros pensarán que es Bioshock por su profunda historia, yo… Wind Waker. Cuando empiezo a jugar a este juego, no me canso, no hay ningún momento donde diga: “Vale, suficiente por hoy” por mí mismo, porque si por mí fuera, me pasaría todo el día visitando las múltiples islas del océano y explorando cada uno de los secretos que tiene… Y siempre que voy por el océano, por la noche, me quedo parado, quieto completamente, me pongo a mirar la luna y a escuchar las olas del mar… Es un momento bellísimo y emocional que sólo cuesta pararse un momentín a contemplar la belleza que supone construir un mundo tan orgánico. Un mundo hecho a partir de un cuento de hadas, un mundo con una música maravillosa, un mundo de riesgos y recompensas, un mundo con peligros gigantescos que puedes llegar a superar, un mundo con gente que me interesa…
Un mundo de leyenda
No puedo escribir en un papel todo lo que me gusta este juego, me es casi imposible, me encanta la mezcla de aventura y puzles, haciéndote sentir que realmente se te recompensa por tu inteligencia y que esta aventura no la podría haber hecho cualquier caballero con una espada gigante, sino que tú, un niño ha podido pasar por las pruebas que te han impuesto los dioses gracias a tu ingenio. Me encanta explorar el mundo y descubrir sus secretos. Me encanta batirme en duelos con caballeros de armadura negra para golpearles gracias a mi entrenamiento y mis objetos. Me encanta conocer gente nueva que me ayude con la aventura. Me encanta este juego y esta saga, no tengo ninguna duda. Tiene todo lo que quiero en un videojuego, permitirme vivir experiencias que nunca antes he llegado a vivir, experiencias memorables que me permita conseguir hacer cosas imposibles. Sé que estoy siendo muy vago, pero conozco muy pocas personas que puedan hablar con total entereza de una película, un juego, un libro que simplemente te apasiona, algo que podrías contemplar durante horas, algo que nunca te dejara insatisfecho… Esa es mi experiencia con este juego.
No tengo palabras para describir lo que me hace sentir el desenlace de esta gran aventura, como Link y Zelda se despiden en aquella emotiva escena de Skyward Sword, para describir la determinación que sentí cuando ví a Ganon caído delante de mía en Ocarina of Time, la perturbación al contemplar el gran árbol de Majora’s Mask, la desesperación y tristeza al oír el lamento de Midna en Twilight Princess… La valentía que me llega a infundir el tema principal de la saga… Es una experiencia, las experiencias son vividas… Nada puede describir perfectamente un sentimiento, así que es imposible que algo pueda ayudarme a describir algo que me produzca tantos sentimientos como esta saga…
Si todavía no habéis jugado a Zelda, dadle una oportunidad a los juegos de esta gran saga, gracias a Wind Waker me adentré completamente en el mundo de los videojuegos, y sé que hay muchas personas que aman a esta saga casi tanto como yo, o incluso puede que más, y no me sorprendería, pues muchos juegos pueden contarte una historia, pero Zelda, Zelda te hace vivir una leyenda.
Muchas gracias por acompañarme a través de este último mes, leyendo mi opinión sobre cada juego, comentando acerca de vuestros sentimientos, escuchando mis palabras en estos momentos… Este último año y mes han llegado a pasar muchas cosas, la industria de los videojuegos ha tenido uno de sus peores años, una tía mía murió por cáncer… Y puede que ahora mismo esté muy sentimentaloide, pero, este año también descubrí lo que era escribir artículos de videojuegos, expresar mi opinión sobre varias cosas, hablar sobre un medio que quiero ver evolucionar… He pasado por malos momentos, cuando todo el mundo me criticaba en el Mes Elemental por poner personajes de Inazuma Eleven, pero esos comentarios de gratitud, de apoyo, de admiración…
Muchas gracias, desde lo más profundo de mi ser.
Nos vemos el próximo año.
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