Análisis Destiny 2: Más Allá de la Luz PS4 XBO PC

0

Cualquier jugador habitual del Destiny estará de acuerdo conmigo con que pocos juegos despiertan tanta expectación ante el anuncio de una nueva expansión. Bungie es experta crear hype a base de unas potentísimas cinemáticas en sus trailers, a la vez que nos van soltando información con cuentagotas, todo ello sazonado con golpes de efecto muy efectivos como en este caso ha sido recuperar a dos de sus más enigmáticos personajes y de los que no habíamos vuelto a saber nada en años.


Además, había que sumarle esta vez las claras intenciones por parte de la compañía de hacer una puesta a punto del juego; un reset en muchos aspectos que sembraba bastantes dudas en la comunidad, a sabiendas de que habían confirmado que debido a la imposibilidad de seguir expandiendo el contenido eternamente, tenían que recurrir a un sistema de rotación de contenido, es decir, sacar contenido del juego mediante lo que ellos llaman “Baúl de Contenido” (Destiny Content Vault) para poder añadir nuevo.

Otro cambio que generaba aún mas dudas, incluso disconformidad entre muchos de los jugadores, era la caducidad de armas (Sunsetting). Hay que tener en cuenta que en Destiny 2 existen unas armas hito y armas pináculo que realmente pueden ser extremadamente difíciles de conseguir, bien sea por la inversión de tiempo o los requerimientos de las quests, que sobre todo en PvP pueden llegar a hacer que sólo algunos jugadores muy dedicados puedan obtenerlas. Ahora, con este sistema de caducidad de armas, todas esas armas pasan a ser inservibles en las nuevas actividades PvE y las PvP competitivas ya que es imposible infundirlas para subirlas al nivel actual de la temporada.


La pregunta que tódos nos hacíamos era, ¿van a ser capaces de darnos suficiente material para que no echemos de menos todo lo que se va? Hay que tener en cuenta que desde el 2017, Destiny 2 no ha parado de crecer y crecer, y la cantidad de actividades, planetas y campañas a las que teníamos acceso era enorme.

Arranco el juego después de la actualización que de paso a “Más Allá de la Luz” (Beyond Light), y lo primero que observo es que efectivamente, la carga del juego es mucho, mucho mas rápida, así como el acceso a los menús e inventario. En un momento estoy en la pantalla de selección de personaje, y la nueva estética con el fondo oscuro me recuerda al Destiny 1, lo cual me encanta.


Selecciono mi personaje principal y accedo a una carta estelar que ha cambiado por completo toda la parte izquierda de la pantalla - han desaparecido Mercurio, Marte, Titán e Ío. Nessus sigue estando en la carta de destinos, pero ni rastro del Leviatán, y en la Tierra también novedades. Junto a la Zona Muerta Europea hay un nuevo/viejo destino, y quizás el favorito en el recuerdo de muchos de nosotros por una cuestión meramente emocional. El Cosmódromo, primera zona del juego que pudimos visitar allá por el 2014 y que fue la antesala a todo lo que estaba por llegar.
Sin embargo, adiós a La Villa, primer área social del Destiny 2, y tampoco veo ya el acceso a las forjas de la Armería Negra. Todos estos cambios se verán reflejados en la Torre también, con las zonas donde podíamos visitar a Ada 1 y Benedicto 99-44 cerradas a cal y canto.

Ok, así que tal y como sabíamos, adiós las incursiones del Leviatán, Corona del Dolor, Espira de las Estrellas, Devoramundos, y la mejor actividad PvE pública para seis jugadores hasta la fecha, La Casa de las Fieras. Tampoco tenemos acceso ya a las misiones excepcionales del Susurro del Gusano, del Brote Primario ni del Mal Juju. Y aunque esta incursión esté ligada a la Tierra, también ha desaparecido Azote del Pasado.
Por supuesto, también han volado todos los asaltos ligados a esos destinos que van al baúl, así como mapas de PvP y de Gambito.

Tengo que reconocer sin embargo que todas estas son actividades y zonas algo antiguas a las que, soy sincero, llevaba tiempo sin darle y con poca intención de volver a hacerlo. Aun así, no puedo evitar sentir esa sensación de querer algo justo por el hecho de saber que ya no lo tienes.
 Entro en el selector de Crisol y a simple vista parece que todo sigue igual. No es así sin embargo en el selector de Gambito, donde la pantalla parece haber retrocedido a cuando se implementó por primera vez en el juego allá por el 2018 con la excelente expansión de Los Renegados. Una sola modalidad de juego, adiós a Gambito supremo y a otra gran (y aceptémoslo, olvidada por la inmensa mayoría) actividad que es La Decisión.



Llegados a este punto, veo que la purga ha sido realemente muy grande, pero reconozco que sí es cierto que por mucho contenido que sea el que se ha ido, a la mayoría de jugadores apenas nos despertaba ya interés. Hablamos de contenido que ha estado allí años, y ha sido exprimido hasta la saciedad. Y es cierto que el juego ahora va mucho más fluido; atrás quedan por fin aquellas cargas entre destinos en las que nos daba tiempo a contestar a cuatro whatsapps e ir a la nevera a por un refresco.



Arranco la campaña de Más Allá de la Luz, y empieza lo bueno. Acerca de ella puedo decir que es probablemente la mejor campaña del Destiny 2, y sí, por supuesto que la de Los Renegados me encantó, pero no sé porqué ésta me ha atrapado más y me ha parecido muy interesante el planteamiento de Eramis, nuestro némesis durante la campaña, que a ratos incluso nos hace dudar de su maldad. Unos niveles excelentes, nuevos tipos de enemigos Vex y Caídos, y una dificultad bastante bien ajustada a nuestro nivel de poder y que hacen que algunas misiones no sean ningún paseo, y como siempre unas cinemáticas sobresalientes que hacen que sigamos la historia de la campaña con facilidad.

Volvemos a encontrarnos con viejos aliados, como La Desconocida y Variks (si podemos considerar a éste un aliado), y algunos mas recientes como Eris Morn o el Nómada. Nada que no supiesemos ya por los trailers que fueron enseñando, pero que expanden el lore de los personajes, y por fin empezamos a ver cómo los acontecimientos y la historia del Destiny 1 y del 2 empieza a fusionarse creando un único universo. Mi única pega es que el hype de ver a personajes tan dispares como Eris Morn, el Nómada y La Desconocida en los trailers reuniéndose frente a lo que parece ser una gran amenaza queda en apenas una anécdota. La interacción con Eris y el Nómada, y su aportación a la hisotria, es absolutamente nula, y La Desconocida no cumple otro papel que el de guiarnos a lo largo de de una quest que nos hara adquirir un nuevo poder oscuro, la Estasis, y posterioremente su mejora - que por cierto me gusta que es muchísimo más personalizable que cualquiera de las otras subclases y que una vez más se parece mucho más a cómo funcionaba el árbol de habilidades del Destiny 1. Me hubiese gustado que La Desconocida hubiese aportado algo más a la historia, pero es una impresión personal.



Toda la campaña y varias misiones post-campaña, como las Cacerías Imperiales, transcurren en la nueva localización Europa, una de las lunas de Júpiter, y hay que reconocer que Bungie sabe crear escenarios que nos atrapan según ponemos un pie en ellos. Un páramo completamente nevado con gigantescas estructuras bajo la superficie que explorar, y por primera vez nos encontramos ante un clima cambiante que puede hacer que de repente nos encontremos en un combate en medio de una ventisca que apenas nos permita ver lo que tenemos enfrente. Es junto a la Ciudad Onírica uno de los destinos que más atrapa visualmente, con un apartado visual de diez.

Durante la hisotria principal de Más Allá de la Luz visitamos fugazmente el Cosmódromo donde inevitablemente nos invade una sensación de nostalgia a quienes ya jugamos al Destiny 1. Sin embargo, sorprende que más allá de eso, el juego no te haga volver ni durante la campaña, ni durante el endgame, quedando una zona de patrulla espectacular a nuestro libre albedrío. También encontramos en esta zona dos de los mejores sectores perdidos de todo el juego, y me gusta que esta vez Bungie les haya sacado provecho, ya que serán los únicos sitios donde podremos conseguir las nuevas armaduras excepcionales del DLC. Para poder conseguir estas piezas, deberemos pasándonoslos sin escuadra y en nivel leyenda o legendario lo cual es un auténtico reto. Todo un acierto bajo mi punto de vista.



Sumado a estas actividades endgame, han añadido un asalto nuevo en Europa y otro en el Cosmódromo, que no deja de ser un asalto reciclado de Ómnigul del Destiny 1. Un asalto que muchos recordarán por ser donde podíamos conseguir el fusil de pulsos Agarre de Malok, tan codiciado por los amantes del Crisol.
Dos muy buenos asaltos que sin duda nos pondrán en aprietos en las versiones difíciles de ocaso, pero que son muy pocos para todos los que han desaparecido, así que espero que no tarden en ir añadiendo más como han prometido que harán. 

En cuanto a la Estasis, es una subclase que básicamente nos permite controlar el frío congelando a nuestros enemigos y usar el entorno a nuestro favor modificándolo creando barreras de hielo o diferentes puntos de apoyo. Muy poderosa y divertida de usar en PvE y Gambito, aunque en actividades de dificultad alta no creo que vaya a reemplazar algunas de las ya existentes.

El gran pero es esta subclase aplicada al Crisol. Literalmente podemos congelar instantáneamente a otros guardianes, dejándoles expuestos a una muerte segura. Cuando lanzamos la súper, podemos encadenar muertes de una forma pasmosa y es casi imposible que nos paren a no ser que sea con otra súper de Estasis que nos congele a nosotros.

Ésto ha creado bastante descontento entre la comunidad PvP, ya de por sí la más castigada con Más Allá de la Luz a falta de loot nuevo que sustituya lo que ha quedado obsoleto, falta de mapas y falta de quests con recompensas exclusivas de Crisol y armas pináculo que conseguir.
Intentar jugar con destreza, escogiendo bien tu equipamiento para cada tipo de mapa, y poder ser congelado por un hechicero que está a varios metros y lanza un golpe cuerpo a cuerpo a distancia, ha hecho que muchas personas que les gusta jugar de un modo mas competitivo en el que la habilidad sea el factor decisivo, hayan aparcado el crisol de momento hasta que Bungie nerfee esta subclase en PvP como ya han asegurado que harán.

Pasada la primera semana de las salida del DLC, empieza oficilamente la Temporada 12, la temporada de La Caza para sumar contenido endgame a las misiones que aún nos irán dando Variks y La Desconocida.


Sin entrar en spoilers, conoceremos un “nuevo” personaje llamado El Cuervo, que nos encargará que vayamos eliminando una serie de enemigos por los diferentes mapas del juego. Para poder acceder a éstos enemigos, deberemos atraerles con un señuelo que podremos ir mejorando para poder escoger exactamente qué recompensa queremos al final de cada enfrentamiento. Básicamente un concepto calcado al Cáliz de la Temporada de la Opulencia pero... una versión muchísimo mas descafeinada.

La cantidad de armas y armaduras palidece en comparación a la cantidad y calidad que podíamos conseguir con el Cáliz, y a diferencia de aquella actividad endgame, con aquella increíble Casa de las Fieras que nadie se esperaba y a todos nos dejó impactados, aquí básicamente iremos a sitios en los que hemos estado mil veces ya, mataremos a un boss y ya está. Sinceramente esperaba mucho más y no creo que sea una actividad que atrape a largo plazo. Es cierto que La Casa de las Fieras era apuntar muy alto pero es que incluso una actividad como Ofensiva Vex ahora me parecería más que suficiente.
Me ha sorprendido además que para las primeras cazas no hayan aprovechado el Cosmódromo, un lugar recién añadido que estoy seguro que muchos de nosotros hubiesemos preferido visitar por la novedad.

Mi conclusión es que Bungie ha hecho una jugada muy arriesgada y está en su mano que salga bien o mal. Ahora mismo todos estamos de luna de miel con la expansión (o tal vez reducción?) del juego, pero una vez hechas todas las misiones endgame, las misiones excepcionales que irán sacando paulatinamente, y la nueva incursión que aún no he jugado, ¿qué va a pasar con los jugadores veteranos? Evidentemente, los nuevos que lleguen tienen material para varias semanas, puede que incluso meses si quieren exprimir a fondo las expansiones de Los Renegados y Bastión de Sombras sumadas a Más Allá de la Luz.

De momento sabemos que volverán asaltos del Destiny 1, mapas de Crisol y algunas armas excepcionales antiguas muy queridas, así como también la incursión de la Cámara de Cristal, pero la nostalgia es efímera y necesitamos novedades que nos sorprendan, no lugares conocidos para recrearnos en los viejos tiempos.

Bungie tiene la oportunidad perfecta para demostrar que todo este espacio que han dejado libre no es para dejarlo vacío, sino ir añadiendo contenido de calidad, el juego lo merece y el potencial lo tiene de sobras. La nueva campaña y la nueva subclase son un gran ejemplo de lo que son capaces de hacer, pero tienen que darse prisa porque los jugadores de Destiny somos jugadores muy dedicados que devoramos todo lo que nos dan a una velocidad pasmosa. Quiero pensar que si se han metido en esta encrucijada, es porque ya saben cómo salir de ella airosos.

Esta review ha sido escrita por Gorka Dresbaj. Mil gracias por tus impresiones y por el pedazo de texto que te has currado.

2 0

Deja tu comentario

Necesitas estar registrado o iniciar sesión con tu cuenta Memondo para poder participar.