Admitámoslo, ser el bueno cansa. Cuando agarramos el mando de nuestra consola nos olvidamos de todo lo demás. Personalmente disfruto mucho más los juegos cuando me dan la opción de desatar el caos. Sí, mis personajes suelen acabar con los ojos rojos, con cuernos y el nivel de karma por lo suelos. Quizás por eso me alegré cuando se anunció Maneater, un juego en el que controlamos a criaturas marinas para acabar con los humanos. Sí, malditos humanos.
El título se vende como un Action RPG en el que nuestro personaje va creciendo y evolucionando conforme nos cobramos nuevas víctimas. El juego es bastante arcade pero tranquilo porque no se olvida de factores importantes como son la exploración de los mapas y el coleccionismo como cofres con nutrientes, matriculas, zonas de interés turístico y enemigos especiales. De vez en cuando nos encontramos con enemigos que nos obligan a utilizar mecánicas como el esquive o huir para curarnos y se agradece.
Nuestro propósito será el de crecer, crecer y volver a crecer para acabar con la vida de los cazadores y de los inocentes que rondan por playas, pantanos o parques temáticos. En total encontramos 7 zonas. Es una pena que se vuelva un poco repetitivo a las pocas horas pero no deja de ser tremendamente divertido. No faltarán opciones de personalización como cráneos, aletas, mandíbulas o movimientos especiales como las embestidas acorazadas con las que podremos dejar barcos como si fuesen bolas de papel arrugadas.
Me atrevo a decir que de lo mejorcito del juego es el comentarista que narra nuestra partida en castellano con chistes que nos sacan muchas sonrisas. El juego te durará entre 10 y 13 horas. Maneater es una genial propuesta que nos recuerda que los videojuegos también son para hacer el cabra y para divertirse. Si te gustan este tipo de juegos pruébalo. No te vas a arrepentir.
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