Super Paper Mario: ese tesoro oculto a simple vista [Parte 2] WiiU

Bueno bueno, aquí estamos otra vez. Probablemente la última vez os cansé mucho con mi charla pero prometo que esta vez será diferente. No tanta teoría, no tanto análisis, solo hablaré del juego y de las emociones que transmite, de lo mejor que tiene reservado.
Comencemos con la música:

La música de este juego tiene alma, no se puede decir mucho más. Hay muchos juegos en los que hay piezas muy bien compuestas pero que apenas tienen personalidad; sí, hay un enemigo gigante y la música es grandiosa y épica, pero habría servido cualquier música grandiosa y épica en ese caso o ese mismo tema habría servido para otro enemigo gigante. En este caso no. Hablaré no de las que creo mejores, sino de las que creo que mejor concuerdan con el personaje.
Vale, hay algunas más típicas, sobre todo la música de los mapas en sí. Queda bien y punto, concuerda con el escenario y puede quedarse en la cabeza del jugador. Pero la mejor sin duda es la de los jefes, sobre todo teniendo en cuenta que cada uno de los esbirros de Cenizo tiene su propio tema y que se adapta a la solución. Veamos el ejemplo con el propio Cenizo:

La primera es la música que suena cuando está maquinando en su guarida, la segunda, cuando se desvela ante los protagonistas y habla de una forma mucho más imponente y la tercera, la batalla final. Sobre una misma base se crean tres melodías igual de intimidantes pero que dan una sensación distinta. Llegar a la batalla final y oír una música que ya has oído previamente puede dar un gran golpe de efecto, sobre todo porque te das cuenta de que el enemigo que podría destruir el mundo siempre ha estado más cerca de ti de lo que pensabas.

Esta es la de la verdadera batalla final, contra Dimencio. Concuerda muy bien con la cinemática porque ese suave inicio que podéis oír ocurre en el momento en el que Dimencio toma el control de Luigi. No tiene ni que esforzarse, un chasqueo y uno de los héroes anda hacia él con toda tranquilidad. Este principio concuerda con la naturaleza burlona de Dimencio como con sus poderes mágicos. Luego se vuelve más fuerte a medida que te adentras en el fragor de la batalla, realmente un tema para una batalla final. Recuerda, se te acaba el tiempo.
Este tema es muy especial para mí. Adoro la música de los videojuegos pero nunca me había fijado en esto tan a fondo. Cuando era pequeño, esta canción fue una de las primeras que me hizo empezar a considerarla y escucharla. Es tan atrayente, y el juego es tan bueno, que me enganchó.

La música contra el rey de los Floro Sapiens, aquel que os comenté que se había vuelto loco por la contaminación en el agua. Imponente a veces, bella otras, con giros inesperados. Es bastante caótica, me recuerda a la batalla contra Giratina; estamos luchando contra un ser demente, la música debe reflejarlo y ser igual de alocada.

Pero no todo son peleas, por supuesto.

Pido perdón porque este no se puede considerar música, más bien sonido ambiente. Es lo que se oye mientras exploras el Río Estigiax. Está muy escondido, tanto que solo se escucha cuando bajas mucho. Realmente causa una sensación de malestar, ir bajando cada vez más por un lago en el que la luz va desapareciendo y esquivando unas manos esqueléticas que quieren acabar con tu partida.

Esta es la música que suena en los flashbacks en los que se habla del pasado de Cenizo y Pisti. Para este cometido, el comienzo como de una gramola antigua que arranca difícilmente funciona a la perfección; al final del último suena como si la máquina se estropeara. Ilustra que son cosas del pasado, que ya han quedado atrás. Sin embargo, se equivocaban, ya que este tema vuelve a sonar en la historia.

Otra de las cosas que me gusta de la melodía es que cada uno de los temas es igual que el anterior pero más completo, como una especie de canon (no sé si se llamará así la técnica que usan, algo similar supongo), hasta desembocar en la versión definitiva al final del juego que mezcla distintos temas.

Y aquí tenemos al tema del lore. Es el tema que suena cada vez que logras un corazón puro. Siempre suena al terminar un mundo y tras una gran batalla. Además, casi siempre suena en lugares rodeados de misticismo como antiguos templos o palacios y muchas veces mientras se oyen historia del pasado o grandes revelaciones. Da la sensación de que nos encontramos en lugar sagrado, que se ha mantenido seguro de los cambios del mundo a lo largo de los siglos. Sin embargo, no da la completa sensación de seguridad, en la música y en las conversaciones se percibe una cierta angustia de que el fin del mundo está cerca, de que hasta estos lugares van a caer. Es la música de profecía, de una profecía sobre la destrucción de todo lo que conocemos. Todo lo contrario al siguiente tema, el último del que hablaré:

La última melodía del juego, lo que suena una vez has salvado al mundo y vuelves a Villacara. Al contrario que el tema anterior este sí que es reconfortante, y eso que todos los personajes acaban de ver un sacrificio enorme delante de sus ojos. Sin embargo, todos tienen la esperanza de que las cosas van a salir bien. Acaban de ver cómo una profecía que parecía imposible de detener era derrotada gracias a esto mismo, a su esperanza, vieron que con el poder del amor podía llevarles a labrar su propio destino. Es un tema alegre, no tiene la alegría pura de La Primavera de Vivaldi, sino una más profunda.
En definitiva, la música es algo que aparece en todo el juego, amplificando los sentimientos que se quieren inculcar en el jugador y conectando la historia.

Y llegamos a mi parte favorita.

Ya os he comentado que el juego comienza diciendo “es una historia de amor”. Cuando era un crío, me fastidiaba eso. “Ya tienen que meter cursilerías para que le guste a las niñas”. Por supuesto, pensaba que solo se refería a la historia romántica entre Pisti y Cenizo.
Ahora soy capaz de ver las bondades en ese amor romántico, al igual que veo que no es el único amor del que se habla. Ya habéis leído que el objetivo del juego es recolectar corazones puros (cursi) para derrotar al corazón del caos, que creó Cenizo para conquistar el mundo al unir a dos personas que no se amaban (casa a Bowser y a Peach).
La boda entre Bowser y Peach es muy curiosa. Se ve a todos los esbirros de Bowser tan felices, como si fuera una boda de verdad. Música alegre mientras Peach es obligada a dar el sí quiero mediante tortura. También se ve a los villanos completamente tranquilos, saben que tienen un poder enorme en comparación con los protagonistas y creen que simplemente desarrollan la profecía, por lo que nada puede salir mal.

Pero, ¿qué son los corazones puros? Los canalizadores del amor de todo el mundo, que los Vetustos entregaron a gente capaz de amar en distintas dimensiones para que los custodiaran.
Al final del juego los corazones puros hacen acto de presencia. Al principio de la batalla no puedes herir a Cenizo pero en un momento dado llegan Bowser, Peach y Luigi, a los que se creía muertos. Esto llena de esperanza a Mario y Pisti y de repente aparecen los corazones puros, que rompen el escudo mágico de Cenizo y permiten a Mario derrotar a Cenizo.
Por supuesto, Cenizo se arrepiente. Quería destruir el mundo porque no le veía sentido a nada sin su amada Pistina. Ahora ella seguía viva, pero ya era demasiado tarde, la profecía ya seguía su curso y la única forma de pararla era acabar con Cenizo. Es el castigo por todo el mal que ha hecho, debe hacerlo para que Pisti pueda vivir aunque sea sin él.
Y cuando parecía que todo iba a acabar con ese trágico final, Nastasia (secretaria de Cenizo, sin ninguna importancia en todo el juego) se interpone entre el Conde y un ataque que aparece de improviso, lanzado nada menos que por Dimencio. “¿Por qué te interpones? Yo solo le estaba dando lo que pedía”.
Dimencio manda a Cenizo y Pisti a otra dimensión y toma control de Luigi para fusionarse con él y con el corazón del caos. Sin duda un bonito giro de los acontecimientos. Al igual que en la batalla contra Cenizo al principio es invulnerable. ¿Cómo lo harán, si ya apenas queda esperanza?
Pues nos hemos olvidado del resto de personajes. Pisti, Cenizo y Nastasia (desmayada) se encuentran en otra dimensión, donde pueden hablar de su pasado y de por qué Cenizo tomó su decisión. En ese momento llegan los esbirros de Cenizo, McCachos y Mimi. Pese a que les hubiera engañado y utilizado, ellos siguen respetándole como su jefe y le piden que no se rinda. Esto desencadena por segunda vez la aparición de los corazones puros. Sí, el amor de Pisti y Cenizo estaba ahí pero también el amor de los dos esbirros.
Y es que no todo es amor romántico. Aquí vemos cómo la lealtad de ellos tres también es una forma de amor, una lealtad que les puede llevar a morir por aquel que les prometía un mundo mejor.

Esa es la moraleja que quería extraer: el amor es arma más poderosa en todas sus formas. El amor por uno mismo, el cariño por los amigos y la familia, el amor por tu raza y por todas las demás, por tu ciudad, por tu mundo, por tu planeta, por tu reino, por la gente que siempre ha estado a tu lado y por aquella a la que nunca has visto. El amor por la naturaleza, el amor por la vida. En fin, el amor por todo lo que existe. Cada uno de los corazones puros del juego representa una forma de amor, desde el familiar hasta la pasión pasando por la confianza y la esperanza.
Y realmente se puede tomar como algo metafórico: en el juego se expresa como unos corazones con un poder mágico en su interior; pero, ¿son todo el amor que aparece? No. ¿Qué sino el amor por todas las cosas que he dicho antes podría impulsar a Mario a seguir adelante? La esperanza de que podrá salvar todo eso le hace luchar sin aliento contra lo que teóricamente es una profecía. Es lo que le hace seguir adelante cuando parece que todo está perdido, lo que impulsa a varios personajes a hacer sacrificios.
Esto es a lo que se referían con “una historia de amor”, el amor en todas sus formas es el motor del juego, tanto de los villanos como de los héroes. Y en el fondo, también es el motor de nuestro mundo.

Al igual que carecen de historia, los juegos de Mario carecen de sentimientos salvo de los nervios y la emoción que conllevan la acción.
Este juego es todo lo contrario. Todos los personajes y el nivel de detalle de los que hablé ayer buscan dar inmersión al jugador para que realmente sienta algo con respecto a lo que ocurre en él. Algunas de las escenas, sobre todo las finales, son realmente conmovedoras. Hablaré de cuatro:

El primer caso es anecdótico. En Villacruz hay una casa cerrada con llave de la cual te explican que perteneció a un antiguo explorador que se retiró tras perder a su compañero en una expedición. Si entras dentro de la casa encontrarás un Pixelito y señales de que es un lugar abandonado.
La misma casa pero en Villacara es precisamente de un hombre que fue explorador, tiene decoración de objetos del mundo que es el espacio exterior. Una vez has terminado el juego y salvado el mundo con ello te dirá que se tiró años de su vida buscando un pixelito legendario y que, cuando prácticamente lo tenía en sus manos, una avalancha se interpuso. Tuvo que elegir entre su compañero y el pixelito, y se decantó por el primero. “A veces pienso cómo habría sido mi vida si hubiera escogido al pixelito, y creo que hice la opción correcta”.
Por supuesto. En la otra ciudad tenemos cómo habría sido su vida. Vergüenza y depresión al darse cuenta de lo que había hecho, el pixelito encerrado en un cofre para el primero que lo encuentre. El premio no supera el sacrificio.
No me había fijado en esto hasta ahora, que lo he rejugado para poder hacer este análisis y que da una lección sobre la vida muy importante.

El segundo detalle está relacionado con la destrucción de los mundos.
Cuando parece que no hay forma de derrotar a Dimencio, se empieza a ver cómo caen algunos mundos. Se ven personajes con los que has interactuado antes, se ven sus rostros de terror. Es para que veas lo que no has podido salvar y te sientas mal. Realmente sientes pena de que vayan a desaparecer. Te llegas a encariñar con ellos. Hablas, ves cómo son, te cuentan sus vidas… sientes que todo eso va a desaparecer. Está hecho para que durante todo el juego conozcas a esa gente y te des cuenta de todo lo que está en juego. Por supuesto, una vez todo ha sido salvado se ven los mismos mundos reconstruyéndose para que veas lo que has logrado salvar; este es el mayor premio del juego: no es un objeto genial, no son nuevos niveles, no es un logro ni siquiera la satisfacción por haberlo conseguido. Es la felicidad por haber salvado a todos los seres a los que has conocido durante esta aventura, algo que por supuesto no te motiva tanto como al principio del juego

Y hablando de un premio:
Una de las partes más emotivas del juego es el final del mundo 7. Tras derrotar al demonio Bocafría, Yayobí (el rey de Masallá) confiesa que Sensibí no es su hija, sino un corazón puro. Pensó que si camuflaba el corazón dándole forma en un ser vivo y la criaba como si fuera su hija nadie lo encontraría nunca. Sin embargo, los engaños no duran para siempre y como dice Bocafría: “el viejo puede juzgar los pecados de los demás, pero no los suyos”; algún día el mundo estará en peligro y deberán entregarle a su hija.
Para ese momento ya le han cogido cariño, ya se ha convertido en su verdadera hija. El momento en el que se lo dicen y se despiden es duro. Más que nada porque no muestran la típica tristeza sino un dolor profundo. Hay gritos, insultos, increpaciones; es una ira fruto de la impotencia. Todos saben lo que va a pasar y no quieren aceptarlo, tienen miedo. Los padres se sienten culpables por haber escondido el corazón puro así, le dieron vida sabiendo que se le sería arrebatada. También cuentan varias anécdotas de su infancia con las que cualquier joven puede sentirse identificado. Es una escena con muchísima fuerza y como dice el juego, “este corazón puro ha salido caro”.
Se te graba a fuego lo que te dicen estos personajes. Sensibí pide que salves el mundo como último deseo y Yayobí, que no permitas que nadie más sienta el dolor de perder a quien quiere por culpa de esta profecía.

Al final del juego puedes volver a visitar a estos personajes. De hecho, puedes volver a hablar con todos los personajes del juego y lo vas a hacer. Como he dicho antes, les coges cariño a los personajes y quieres ver qué tal les va a todos ahora; si han recapacitado, qué cambios van a hacer en su vida, cómo se han tomado el casi fin del mundo…

Cuando llegas a donde están Hadesia y Yayobí te llevas una sorpresa: Sensibí está viva. Pero no es como en cualquier obra de ficción en la que un personaje que creían muerto se salvó por los pelos, es más complejo. Sensibí no era algo natural, sino una ilusión fruto de la magia; no había muerto sino que se había convertido en otra cosa, ¿cómo puede ser que esté viva? Es una irregularidad existencial, no se puede resolver usando la lógica.
Sin embargo, el propio juego responde a la pregunta: “¿qué más da? Mira cómo sonríe…”. Su padre te da las gracias, su madre te dice que es un milagro. A ti te da igual, sientes una gran felicidad solo por ver que una niña está viva y feliz.

Por último tenemos el caso de Pisti y Cenizo. Habréis observado que he hablado varias veces del final del juego pero evitando hablar de qué pasó con ellos dos. Allá va:

Dimencio ha sido derrotado pero dejó una estela mágica que hace que la destrucción de los mundos siga adelante. Cenizo lleva a todos los protagonistas a un lugar seguro, la sala donde al principio del juego se celebró la boda entre Bowser y Peach y allí reafirma que la única forma de detenerlo es que él sea destruido. Insiste a Pisti que aunque él se vaya ella puede seguir su vida, pero Pisti no quiere vivir sabiendo que Cenizo se sacrificó por todos ellos, no quiere dejarlo solo. Se van juntos a un altar y allí Cenizo vuelve a jurar que la ama, que siempre lo ha hecho y que siempre lo hará pase lo que pase. En el mismo lugar donde se originó todo por la unión de dos que no se querían, se acaba con la amenaza gracias a que otros dos se juran amor eterno desde lo más profundo de su corazón. Con la versión definitiva de Memory de fondo surge el corazón puro supremo, la destrucción de todos los mundos se detiene y se reconstruyen los que habían caído. Tras ello Pisti y Cenizo desaparecen y lo único que se oyen son unas campanas que “les dan la bienvenida” según Peach. ¿Realmente se ha detenido a profecía por el fin de Cenizo o es que los dos han dado la muestra suprema de amor que la ha derrotado?

Ambas cosas son posibles. Los protagonistas del juego creen que es lo segundo, y que Pisti y Cenizo están en un lugar donde por fin pueden amarse; después de haber derrotado a un destino, presuntamente seguro, tienen esperanza en que todo saldrá bien. También creen, pese a todo, que Cenizo merece ser feliz tras su acto de redención.

Ahora lo único que importa es celebrar la vida y esforzarnos por construir el mundo que ellos querían ver.

Después de una simpática escena ("Las despedidas son tristes, pero mientras vivas no podrás evitarlas. Estar triste es vivir... Y mientras estés con vida, el futuro es una página en blanco. Me ha entrado hambre. Le he pedido a Azafrán que nos prepare una deliciosa merienda") comienzan los créditos, y después de ellos una imagen en la que nunca me había fijado en todas las veces que lo jugué hace años
Es una de las cosas más emotivas que he visto nunca y eso que ni siquiera explican qué significa. No hace falta, todos lo sabemos.
Un árbol y dos figuras, una masculina y otra femenina. Cenizo y Pisti, Blumière y Pistina. Los dos juntos, solos y felices.

¿Son ellos antes de ser separados? ¿O realmente han hallado ese lugar donde pueden amarse eternamente? ¿O quizá es cómo habrían sido de haber huido a tiempo? No podemos saberlo. Solo sabemos que la pantalla se funde en negro mientras suena Memory de fondo, el juego se ha acabado y tanto Mario como nosotros solo hemos sido unos meros espectadores de una historia.

Una historia de amor como tantas otras, pero a la vez una con su propia alma.

Con todo este artículo he querido daros a conocer este juego y explicaros por qué merece mucho más reconocimiento del que tiene. Terminaré con una metáfora que puede ayudarnos a comprender la situación de este juego.

Los juegos son como las personas. Las hay más pretenciosas, más simpáticas, más profundas, más simplonas, más intelectuales… Pero lo más importante es que para conocer a una persona hay que pasar tiempo con ella.
Muchas veces hay personas con rasgos muy llamativos y características que las hacen especiales, pero eso solo sirve para que los desconocidos las reconozcan. Los que son más cercanos a ellas las recordarán por otras cosas como sus gestos, sus expresiones, sus manías, sus gestos… Las mismas cosas que nos hacen recordar a las personas que llaman menos la atención.

Con los juegos pasa lo mismo. Alguien que conozca la saga Paper Mario y no haya jugado a este, tendrá como imagen de él un juego de la saga para Wii, más plataformero que los anteriores y con la mecánica de cambio de diversión. Sin embargo, con el paso de los años, los que lo hemos jugado recordaremos todo menos la mecánica del cambio de dimensión; recordaremos a Mimi convirtiéndose en araña, recordaremos el templo del frikismo de Francis, recordaremos los laberintos de la Comarca Rocolita y recordaremos la aparición estelar de Dimencio, pero no el cambio de dimensión.
Como yo conoceréis a gente que realmente no aporta tanto en este mundo. A la mayor parte de sus conocidos no les ha cambiado la vida, sería completamente igual si ellas nunca hubieran existido; pero esto no significa que puedan desaparecer un día y el mundo siga igual. Todos dejan su huella en sus seres queridos, puede parecer nimia no lo es. La gente que realmente las conoció seguirá recordándolas con el paso de los años aunque para otras personas no fueran tan memorables.

Super Paper Mario no es un juego que aporte tanto en el conjunto global del mundo de los videojuegos y todo seguiría igual si nunca hubiera existido. Pero existe, y para los que lo hemos jugado sí que es único. Igual ahora alguien lo juega y ve que no es para tanto al igual que las cualidades que nos hacen querer a alguien pueden no ser para tanto, pero para nosotros son especiales. Podemos sentirnos orgullosos de haber conocido este juego, que ha sido creado con dedicación y esmero para nosotros.

Hay juegos que te hacen admirarlos por lo bien hechos que están, hay juegos que buscan simplemente divertirte, otros te ofrecen un desafío, algunos incluso te invitan a vivir en su mundo virtual. Puede que Super Paper Mario no sea una obra tan grandiosa pero es un juego que te hace amarlo. Su mundo, su música, su historia, te enamoras de todo lo que el juego te ofrece. Esto es para mí lo más importante en un juego (y en una persona, siguiendo la comparación): no tiene que brillar para todo el mundo ni ser recordado entre aquellos que no lo conocieron, sino calar hondo en el corazón de los que lo han vivido.

¡Muchas gracias!