Le tendió una emboscada, y desde entonces no se ha vuelto a ver al pokémon
Hoy os traemos la intrigante historia de Juanito, un habitante de Pueblo Ladrillo, de Teselia, quien asegura haber conseguido tender una trampa y eliminar a Kyurem, el monstruo que lleva siglos aterrorizando el pueblo.
Chinchou- Muy, bien, señor Juanito. ¿Podría contarnos su hazaña?
Juanito- Poh claro. To’ empesó cuando me conseguí uno’ dia’ de vacasione’, ‘sí que cogí la amoto der garaje y me puse en marxa pa’ Siudá Porcelana, pero me perdí y acabé en un lugá llamao Badalona. La cosa é que xa que ‘taba ahí, vi que ‘taban celebrando las fiestas der pueblo, ‘sí que me quedé.
C- Muy bien, señor, pero… ¿Eso qué tiene que ver con Kyurem?
J- Shhh. Calla y escucha, pokemonucho. La cosa é’, al paresé ahí la’ leyenda’ dicen que er diablo solía salí’ d’un ‘bujero, hacía trastadas y luego se volvió a meté’ al salí’ el sol. Asicunbuendía, loh pescadore’ l’isieron má’ pequeño er ‘bujero, y pa’ cuando er demonio se fue a meté’, ya no cabía y murió ar darle la lú’.
C- Vaya, interesante leyenda.
J- Muxo. Y como que me recordó a lo que llevamo’ sufriendo muxo tiempo ‘qui en Ladrillo, disidí intentá lo mi’mo a vé si funsiona. En cuanto s’iso de noxe, me dirigí ar Boquete Gigante, y tapé la entrá con la pala pa’ sembrá’ er huerto. É’ má’, po’ si acaso, puse un par de pañelico’ de recuerdo que me llevé de la siudá’, pa’ que ahuyenten a Kyurem y lo debiliten aún má. Desde ese dia, no ha vuerto’ a pasar ná’ por la’ noxe’.
Imágenes aéreas de la zona del Boquete Gigante, antes y después de que Juanito lo tapara.
C- Entonces, asegura que gracias a usted, Kyurem ha muerto y Pueblo Ladrillo está a salvo.
J- ‘Sactamente, pokemonucho de tré’ al cuarto.
C- Pero por lo que nos ha contado antes de la entrevista, esto sucedió en las mismas fechas que el atentado del equipo Plasma. ¿No cree que podría haber sido una simple casualidad, y hubiera sido el chaval que los paró quien se hizo con Kyurem?
J- Mira, pokemonucho. Me tiene’ hasta arriba. ¡Y si argo se me ha quedao’ desa’ siudá’ é la muxa violensia q’ay, así que o me deja’ en pá’ o navajaso que te lleva’!
Imagen de uno de los pañuelos-amuleto que traía consigo Juanito. Según él, las escrituras dicen “Fiestas de la cerveza” en un extraño idioma.
Tras estas amables palabras, decidí que no era buena idea decir que los chinchou somos resistentes a tipo-acero, y simplemente nos largamos de ahí, esperando que no nos encontráramos a otro locuelo de camino a la redacción.
Les ha informado Chinchou, y nos vemos en la próxima.
6 comentarios