Tras su estelar aparición vestido de Mario en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Río, muchos medios de comunicación creyeron que esto era solo una graciosa anécdota del primer japonés Shinzo Abe. Sin embargo, a uno de nuestros redactores, James26, le han llegado esta mañana unos impactantes documentos que vendrían a demostrar el suceso más perturbador en la historia japonesa desde los pachinkos de Metal Gear.
Según expone este material, la famosa empresa lleva ejerciendo un despótico control sobre el país del sol naciente desde 1889, año que fue fundada por Fusajiro Yamauchi. Al parecer, el señor Yamauchi no era un simple artesano, sino un peón de los grandes magnates nipones para conseguir hacerse de manera discreta con el control total del país sin que las potencias occidentales sospechasen nada en absoluto y vender amplias cantidades de productos industriales en el mercado negro.
La compañía fue creciendo en importancia, y para 1905 el Emperador y su familia no eran más que títeres de la todopoderosa empresa. Ese mismo año, Japón le declara la guerra al Imperio Ruso con la excusa de asegurar su hegemonía naval en el norte del país y en la costa china, cuando en realidad era todo un plan de Nintendo para que su cuota de mercado en Asia fuera hegemónica y echar de la zona a CYKA-BLYAT Corporation, propiedad del Zar Nicolás II.
El 23 de Agosto de 1914, Nintendo consigue que Japón se una a los aliados, para así expandir aún más su área de influencia expulsando a los alemanes en Papúa Nueva Guinea. En estas fechas, empiezan a dibujarse los primeros bocetos de Mario y Luigi bajo estrictas medidas de seguridad.
Sin embargo, el imperialismo de la compañía kawaii no conoce límites y en 1937 invade China aprovechando su guerra civil y la descentralización del gobierno de Chiang Kai-shek y el Kuomingtang en pos de los señores de la guerra. El infame escuadrón 731 experimenta sobre civiles chinos para perfeccionar sus armas de destrucción masiva: las infames tortugas verdes, rojas y azules.
4 años despúes, un devastador ataque japonés sobre Pearl Harbor hace que EEUU entre en guerra. Al parecer, el almirante Yamamoto drogó a los pilotos con champiñones dorados y rojos para aumentar su efectividad.
Sin embargo, los planes de Nintendo se frustran tras las repentinas derrotas japonesas en el Pacífico y el suicidio de Adolf Hitler, quien se olvidó de tomar el champiñón verde para ganar una vida extra y hacer respawn en Argentina, como se tenía previsto.
Cartel de propaganda de la Segunda Guerra Mundial
En 1945, Hirohito anuncia la rendición del país. Sin embargo, Nintendo consigue recuperarse de esta grave derrota, y pasa décadas preparando su expansión mundial. No ajeno a esto, la CIA crea en 1960 SEGA para intentar hacerle frente, teniendo un éxito moderado. Aún así en 1985 con el lanzamiento de Super Mario Bros su fama e influencia internacional crece exponencialmente, aumentando aún más con el lanzamiento de Pokémon y la Wii, aunque gracias a SONY (otra empresa creada para frenar a Nintendo, esta vez de manos del SAS), la Wii U fracasa.
Para desgracia de sus adversarios, en verano del 2016 se lanza Pokémon Go y, a pesar del reclutamiento de haters en masa para intentar hacerles frente, los intentos de sabotaje son en vano.
¿Estamos ante la filtración más grande de la Historia, o por el contrario esto es solo un gran bulo? Solo el tiempo lo dirá
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